Análisis de la carrera

Sin duda, con la victoria de hoy en Marina Bay, Fernando Alonso ha vivido este fin de semana uno de sus mejores momentos como piloto de Ferrari ya que ni soñándolo podían haberle salido mejor las cosas.

Tras un emocionante final, en el que el asturiano logró mantener el tipo y resistir  los duros envites de Sebastian Vettel, convertido en su sombra desde las últimas vueltas, el piloto de Ferrari se llevó los 25 puntos (y sumando su victoria número 25 en su carrera) y se ha logrado aupar hasta el segundo puesto de la clasificación del Mundial.

En una gran carrera, en la que pronto se pudo comprobar que esta vez iba a ser un duelo únicamente entre Fernando Alonso y Vettel, ambos pilotos dieron un recital de técnica, pilotaje y destreza en las 61 vueltas que ha durado este Gran Premio, marcado por los incidentes de carrera, especialmente el que motivó el nuevo abandono de Lewis Hamilton, en este caso tras una polémica colisión con Mark Webber.

Momento de la salida del GP de Singapur

La carrera en sí, como digo, no tuvo más historia que ver cómo Alonso, tras una salida dubitativa pero en la que pudo mantener a duras penas su privilegiada posición, empezó de la mejor manera posible, marchándose junto a Vettel casi de inmediato y pulverizando las vueltas rápidas una por una. Detrás quedaba el resto de rivales directos, con Hamilton en tercer lugar, Button en cuarto, mientras que el líder del Mundial, Mark Webber caía a posiciones desconocidas para él.

Pero pronto empezaron los incidentes a marcar la pauta cuando, con apenas tres vueltas disputadas, tuvo que salir el primer Safety Car de la jornada cuando los dos Force India emparedaban al Sauber de Heidfeld, el sustituto de Pedro de la Rosa, y el italiano Liuzzi -el peor parado del incidente- tenía que abandonar su coche en mitad de la pista.

En ese momento se produjo un hecho que puede haber decidido el Mundial y fue el cambio de la estrategia, de forma muy acertada como se pudo ver después, del equipo Red Bull. Así pues, cuando tan sólo se llevaban cuatro vueltas y con el Safety Car aún en pista, Webber entraba por primera y única vez a realizar su parada.

Alonso y Vettel, mano a mano hoy en Singapur

Tras relanzarse la carrera, las cosas siguieron igual, con Alonso y Vettel, poniendo de nuevo tierra de por medio con respecto a sus rivales, seguidos de los McLaren de Hamilton y Button, mientras que Webber, que había caído hasta la 15ª posición tras su pitstop, empezaba a dar buena cuenta de sus rivales.

Y así transcurrieron, sin excesivos sobresaltos, las vueltas siguientes, en un espectáculo de conducción brindado por Alonso y Vettel, interpretando a la perfección una sinfonía de vueltas rápidas, calcándose los tiempos y manteniéndose a raya de manera formidable.

El primer momento de tensión entre ambos pilotos se vivió en el momento de la parada en boxes. Alonso, que aunque mantenía una cierta y cómoda ventaja que oscilaba entre los dos y los tres segundos con Vettel, salvaba su primer match-ball con el alemán al realizar ambos a la vez su parada en boxes, saliendo de nuevo primero a escasas décimas del piloto de Red Bull, que iniciaba de nuevo la persecución del Ferrari.

Sin embargo, pronto la carrera entraría en una nueva dinámica cuando, en la vuelta 32, el Sauber del japonés Kobayashi se salía al tomar una curva y se estampaba contra las vallas, quedando su monoplaza atravesado casi en mitad de la pista  Los que iban justo detrás del japonés pudieron evitarlo pero Bruno Senna, que venía más rezagado se lo encontró de bruces y empotraba su Hispania contra los restos del Sauber, obligando a una nueva entrada del Safety en pista.

Justo entonces llegó la polémica y se produjo un hecho que bien puede haberle costado a Hamilton el campeonato del mundo. Así pues, una vez retirados los restos de ambos coches y con la carrera nuevamente lanzada, Webber, que ya había ascendido hasta la cuarta plaza se tiraba como un poseso a por Hamilton en una curva. El británico, que le había aguantado bien la posición, le cerraba la puerta al australiano de Red Bull y éste colisionaba contra la trasera del McLaren, sacándole de la pista…y de la carrera, quedando nuevamente K.O., por segunda vez consecutiva.

La actuación del australiano fue investigada por los comisarios pero instantes después determinaron que aquello no había sido más que un incidente de carrera dejando las cosas como estaban.

Y así las cosas, con Alonso, sabedor del incidente y conociendo que dejaba fuera de los puntos a uno de sus más directos rivales, empezó a tirar a  muerte, seguido de Vettel, que definitivamente había decidido ir a por el asturiano. Esta lucha nos dejó unos instantes finales memorables, con Vettel recortándole las ya de por sí exiguas diferencias al español y protagonizaron un emocionante duelo en el que el asedio del alemán se quedó sin recompensa. Fernando Alonso se llevaba finalmente el gato al agua, con una merecida y, sin duda, trabajada victoria por apenas dos milésimas sobre el piloto alemán.

Lo mejor y lo peor del día

Lo mejor, sin duda, el carrerón de Alonso que nos ha dejado un duelo para el recuerdo, con una emoción en los instantes finales de carrera que hacía tiempo que no vivíamos. Pero también hay que destacar nuevamente las carreras de los mejores de la llamada «clase media».

Nico Rosberg, estuvo muy bien, actuando como un reloj suizo toda la carrera y finalizando quinto. Por su parte -aunque ya no es sorpresa- excelente el polaco Robert Kubica, que aunque tuvo que parar dos veces, dio un recital especialmente las últimas vueltas protagonizando los mejores adelantamientos de la jornada y una grandísima remontada que le llevó desde el 14º puesto hasta el 7º puesto final. Y muy bien los Williams hoy, con el veterano Barrichello, sexto y su compañero Hulkenberg, noveno.

Excelente la carrera hoy del polaco Kubica con Renault

Lo peor, nuevamente la enésima decepcionante carrera de Michael Schumacher, muy atrás todo el tiempo (navegando entre el 9º y el 10º puestos) y que, para colmo de males, se vio envuelto en un aparatoso accidente con su compatriota Heidfeld, que le llevó a boxes a cambiar el morro y haciéndole perder todas sus posibilidades de puntuar.

Tampoco podemos ni debemos olvidarnos del equipo Sauber, que pese a la gran clasificación de Kobayashi tras los entrenamientos del sábado (partía en 10ª posición) no logró acabar con ninguno de sus coches en los puntos, tras sendos accidentes del sustituto de De la Rosa (que motivaron de hecho, sendas investigaciones aunque sin consecuencias para el alemán) y con el citado accidente de Kobayashi. No les ha servido para nada el cambio de Pedro, lo cual deja bien claro que tal vez el piloto español no era el problema…

Por último, pésima y lamentable la imagen de Kovalainen, apagando él mismo , el fuego que en cuestión de segundos destruyó parcialmente su Lotus con un extintor que le pasaron desde las vallas, apenas a una vuelta para el final.

Imagen del Lotus de Kovalainen, ardiendo en línea de meta

En primer lugar, no entiendo por qué el finlandés no metió su coche directamente al pitlane cuando lo traía ya en llamas y, sin embargo, decidió continuar la marcha, para acabar parándose unos escasos metros después en plena recta de meta, con el consiguiente riesgo para él y para el resto de pilotos. Y en segundo lugar, no entiendo tampoco la pasividad de los comisarios que no saltaron rápidamente a la pista a extinguir el fuego y dejaron que fuese el propio piloto quien lo apagase.

Españoles en carrera

Junto a Fernando Alonso y su merecido triunfo, que le sitúa como el quinto piloto que más carreras ha ganado en la historia de la Fórmula 1, el único español que nos quedaba era Jaime Alguersuari. Lástima que, tras protagonizar una excelente clasificación el sábado, logrando la 11ª posición (la mejor de su corta pero intensa carrera como piloto) por problemas en el coche tuviera que partir desde el pitlane. Ahí acabaron sus opciones y bastante tuvo con mantener el tipo durante toda la carrera y finalizar 12º, justo por delante de Michael Schumacher y su compañero Sebastian Buemi, aunque dando un paso importante de cara a ganarse la renovación en el equipo Toro Rosso, que a estas alturas de temporada, sigue aún en el aire.

Pódium del GP de Singapur 2010, con Alonso, Vettel y Webber

Clasificaciones de carrera y del Mundial

La carrera, tras 61 vueltas y casi rozando el límite reglamentario de las dos horas, quedó finalmente como sigue:

1º) Fernando Alonso (Ferrari), en 1h 57′ 53»

2º) Sebastian Vettel (Red Bull Renault), a 0’02»

3º) Mark Webber (Red Bull Renault), a 29,1»

4º) Jenson Button (McLaren Mercedes), a 30,3»

5º) Nico Rosberg (Mercedes GP), a 49,3»

6º) Rubens Barrichello (Williams Cosworth), a 56.1»

7º) Robert Kubica (Renault), a 1’26»

8º) Adrian Sutil (Force India Mercedes), a 1’52»

9º) Nico Hulkenberg (Williams Cosworth), a 1’53»

10º) Felipe Massa (Ferrari), a 1’53»

La clasificación del Mundial de Pilotos vuelve a apretarse con esta nueva victoria de Alonso que, además se ve favorecida por el abandono de Hamilton, el cual vuelve a dejar su casillero a cero y ve alejarse sus opciones para el Mundial.

De este modo, Webber sigue líder, con 202 puntos, pero seguido ahora muy de cerca por Fernando Alonso, a tan sólo 11 puntos (191 puntos) y por el británico Lewis Hamilton, que pierde gran parte de sus opciones de victoria final, con 182 puntos.

Salto de gigante hoy de Alonso en su asalto al Mundial

En lo referente al Mundial de Constructores, las cosas siguen como estaban aunque se amplía la brecha entre el primero y el segundo clasificados. Así pues, sigue de líder el equipo Red Bull, con 383 puntos, seguido de McLaren con 359 puntos y Ferrari, en tercer lugar, con 316 puntos.

La próxima carrera

Para la próxima cita en el calendario, que será el próximo 10 de octubre en el mítico circuito de Suzuka de Japón, nos tocará madrugar ya que se disputará a las 8 de la mañana en horario peninsular español. A esta carrera llegamos en una situación muy similar a la vivida en el año 2007, con aquel follón tan tremebundo en las filas de McLaren con Alonso y Hamilton y con Kimi pisándoles los talones. Aquel GP de Japón, que ganó el británico brillantemente bajo el diluvio universal, empezó sin embargo a convertirse en la «tumba deportiva» de Hamilton ya que no hace falta recordar cómo acabó finalmente el bueno de Lewis aquella temporada.

Afortunadamente, Fernando Alonso no es Hamilton (ni para lo bueno ni para lo malo) y dudo mucho que el asturiano, ahora que ha encontrado la senda del triunfo, pueda ser vencido por la presión como lo fue en su día su gran rival en McLaren, y como parece estar ocurriéndole ahora de nuevo.

Ahora las cosas están más o menos igual que entonces, solo que ahora es Hamilton el que peor lo tiene para ganar el título, mientras que Alonso es el que en mejor forma se encuentra de todos y el que puede darle otro zarpazo al campeonato. De momento, gran parte del trabajo está hecho y ya está segundo y dependiendo prácticamente de sí mismo. Ahora resta saber si Hamilton tira la toalla o se vuelve a subir al carro.

De nuevo, pues, otra «bola de partido» para Alonso que, de seguir así, puede dejar el campeonato en una cosa de dos únicamente y con todo en su mano para levantar su tercer campeonato del mundo.