No es un secreto que las relaciones entre Mark Webber y el equipo Red Bull, o al menos una parte importante del equipo, nunca fueron precisamente las mejores. Lo que no imaginaba es que el australiano iba a tardar tan poco en rajar de su ya ex-equipo y que lo iba a hacer de la forma en que lo ha hecho.

Malasia, uno de los momentos de máxima tensión entre Webber y Vettel
Malasia, uno de los momentos de máxima tensión entre Webber y Vettel

Sin grandes exabruptos pero sí con una contundencia fuera de lo común en un tipo generalmente comedido como lo ha venido siendo Webber a lo largo de estos años, el australiano se ha despachado con dureza contra Red Bull, especialmente, contra su «mandamás», Helmut Marko, su director deportivo Christian Horner y su ex-compañero Sebastian Vettel.

Curiosamente, esta misiva fue editada después por el propio Webber y suavizó mucho los términos de sus críticas. Sin embargo, fue demasiado tarde. Las redes sociales ya se habían hecho eco del texto inicial por lo que, pese a los esfuerzos del piloto australiano por borrar las «pruebas del delito»,no pudo evitar que trascendiese el contenido incial de la carta.

En una carta pública de despedida hecha pública en su propia web, Mark Webber bajo el título «Significant Others» (algo así como «Otras personas relevantes»), el australiano fue muy crítico hacia Helmut Marko, del que llegó a decir que nunca supo exactamente a qué se dedica en el conglomerado austríaco . “Todavía no sé qué papel tiene en el equipo. Sólo sé que fue uy crítico conmigo desde el primer día, pero al final él trajo a Sebastian (Vettel), por lo que ha hecho un buen trabajo con esto».

Asimismo ironizó acerca de la posible estima que Marko pudiese haber sentido hacia él, Webber dijo del directivo austríaco que «probablemente, está decepcionado con el hecho que los equipos de Fórmula 1 tengan dos coches”. Vamos, que si por Helmut Marko hubiese sido, Red Bull debería haber corrido sólo con el monoplaza de Vettel todos estos años.

Tampoco salió bien parado su ex-director, Christian Horner. El australiano reconoce cómo la magnífica relación que tenía con él se fue enfriando a lo largo de las últimas temporadas hasta hacerse prácticamente nula al final de su periplo en Red Bull. Es más, culpa al propio Horner de haber tensado la relación sólo para beneficiar a Vettel.

Christian (Horner) va a estar en el equipo mucho tiempo, indefinidamente, a menos que consiga una propuesta de otro lugar. Así que tenía que asegurarse de mantenerlo todo lo más tranquilo posible. En algunos casos, no me beneficiaba a mí, por lo que puso tensión en la relación”, dijo Webber.

Sebastian Vettel también recibió lo suyo por parte de su ex-compañero. Y por lo que cuenta, da la sensación que la cosa no proviene del famoso episodio del «Multi 21» en Sepang sino que, por lo que dice de Vettel, parece que el mar de fondo existente entre ambos pilotos viene de mucho más atrás en el tiempo, probablemente desde su incidente durante el GP de Turquía de 2010.

Helmut Marko y Mark Webber, como el agua y el aceite para el australiano
Helmut Marko y Mark Webber, como el agua y el aceite para el australiano

Así pues, en su carta de despedida, lo que al principio son unas tímidas loas hacia su figura, se acaban tornando en duras críticas hacia el tetracampeón alemán. «Tiene un talento natural fantástico, sabemos que su punto fuerte está en los entrenamientos clasificatorios y las cinco primeras vueltas de carrera, es su marca de la casa, esta es la parte más complicada de controlar y ha brillado con ello», dijo Webber sobre el piloto germano.

Sin embargo,cuando se refiere a la convivencia con el alemán y a la relación que mantuvieron como compañeros de equipo, Webber se volvió mucho más crítico. «En nuestra relación resulta más difícil pensar en la parte positiva que en la negativa, así que ha sido una decepción, porque quieres mantener una opinión respetuosa de todo el mundo, les das tantas oportunidades como puedes”, añadió el australiano.

«Han pasado demasiadas cosas entre nosotros. Quizás cuando tengamos más de 50 años todo sea diferente, pero tras lo que ha ocurrido entre nosotros es difícil hacer borrón y cuenta nueva. Por supuesto, no me importa nada, e imagino que a él tampoco», concluyó.

Por último, y para ahondar en la herida, Webber no perdió la oportunidad para meterle el dedo en el ojo a su ex-compañero, posicionándose claramente del lado de Fernando Alonso, amigo personal del australiano y el gran rival de Vettel de estos últimos años.

«El domingo por la tarde es el mejor. Increíble. Su habilidad para llevar al coche a ese nivel durante dos horas es absolutamente excepcional. Repasando al número de incidentes que ha tenido, son poquísimos, lo que es otro recordatorio de que, como piloto en carrera, es la referencia el domingo por la tarde. De todas formas, a una vuelta probablemente hay pilotos que son un poco más rápidos, pero sobre 19 carreras y en todo tipo de condiciones, el domingo es tu hombre”.
Fernando Alonso, el mejor piloto para Mark Webber
Fernando Alonso, el mejor piloto para Mark Webber

Adrian Newey, el único en salvarse de la quema

Pese a que no dejó prácticamente títere con cabeza, Mark Webber salvó de la quema expresamente a su director técnico, Adrian Newey. El ingeniero británico es la única persona de la que parece guardar un buen recuerdo de sus años en Red Bull. «Es una de las razones por las que he seguido hasta ahora», dijo el ex-piloto del equipo austríaco.

El australiano se deshizo en elogios hacia el genio británico y al que considera de verdad el alma máter de los éxitos de la escudería de bebidas energéticas.«Adrian es, con mucho, el mejor con el que he trabajado para entender un coche de carreras», afirmó tajantemente el piloto.

«He trabajado con mucha gente, pero la habilidad de Adrian para llevar a cabo lo que el piloto y el coche necesitan es simplemente extraordinaria. Es alguien inspirador para trabajar. La gente le podría ver como alguien tímido, pero es alguien increíblemente competitivo, le he visto cuando nos han batido claramente, y no es algo con lo que disfrute, y le he visto cuando hemos hecho el doblete, y sus reacciones no han sido diferentes», concluyó Webber.

Aparte del carácter aparentemente bonancible del británico, Webber no olvidó que Newey fue el único que le mostró su apoyo pública y privadamente cuando en 2010 y en plena pelea por el título de aquel año, el australiano sufrió un accidente de bicicleta que le provocó una lesión en el hombro.

Una lesión que, sin embargo el australiano ocultó a su equipo y mermó su rendimiento en las últimas cuatro carreras del año, hasta el punto que mucha gente en el equipo, empezando por el propio Horner, considerase que aquello le pudo suponer la pérdida de un Mundial que, justo a esas alturas de campeonato, tenía en su mano.