Logo ChevroletEl gigante norteamericano General Motors ha anunciado que dejará de distribuir la marca Chevrolet en Europa a partir de 2016, debido a la mala situación del mercado europeo, en el que no ha terminado de lograr una implantación relevante.

Desde que el año 2005 General Motors compró la coreana Daewoo y empezó a potenciar su presencia en Europa bajo el paraguas de Chevrolet, las ventas han sido escasamente significativas (en torno a 200.000 unidades), algo que el vicepresidente del fabricante de Detroit, Stephen J. Girsky, ha calificado como «inaceptables».

Este bajo nivel de ventas de la producción europea de la marca, fabricada íntegramente en Corea del Sur, obligó a Chevrolet a adoptar una política de precios cada vez más agresiva, desposicionándose del mercado hasta el punto de llegar a competir directamente con otras marcas del grupo en Europa, sobre todo Opel y Vauxhall.

Precisamente, uno de los argumentos esgrimidos por General Motors para justificar la toma de esta drástica decisión es el de concentrar sus fuerzas en la comercialización de sus dos marcas más punteras, Opel y Vauxhall (ésta únicamente implantada en el mercado británico), así como impulsar el desembarco europeo de su marca estrella, Cadillac.

De hecho, la marca premium norteamericana tiene previsto lo mejora y ampliación de su red de distribución  y el lanzamiento de varios modelos nuevos en los próximos tres años.

Chevrolet dejará de venderse en Europa a partir de 2016
Chevrolet dejará de venderse en Europa a partir de 2016

 

La desaparición de la marca en Europa va a suponer un desembolso importantísimo, cifrado por fuentes de la propia General Motors en unos costos de entre 700 y 1,000 millones de dólares, que serán asumidos entre el cuarto trimestre del 2013 y el primer semestre del 2014.

Pese a todo, el fabricante norteamericano ha asegurado que ayudará a toda su red de distribución en Europa. Además, continuará ofreciendo todas las garantía en las piezas y servicios, tanto para sus clientes de Chevrolet más antiguos como para los de aquellos vehículos comprados hasta final de 2015.

En este sentido, la patronal de los concesionarios en España, Faconauto, ha mostrado su preocupación y ha pedido a Chevrolet que les explique en detalle el alcance de esta situación, que afectaría a los 85 concesionarios oficiales de la marca norteamericana en nuestro país y que dan trabajo actualmente a más de 1.000 personas.

Asimismo, ha exigido a General Motors que respete las inversiones que la red española de concesionarios Chevrolet ha venido haciendo en los últimos años con el fin, precisamente, de impulsar su actividad y crecimiento. De hecho, su red comercial se había visto reforzada con la apertura de nuevos puntos de venta en el último año y había tenido que afrontar una serie de costes que, paradójicamente, la propia marca les había exigido en los últimos meses.