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El piloto del equipo Marussia, el francés Jules Bianchi está siendo operado para reducir los hematomas cerebrales consecuencia del tremendo accidente sufrido hoy en Suzuka.
Su estado en estos momentos es crítico y su vida corre serio peligro, según ha informado la FIA en un comunicado, en referencia al estado de salud del joven piloto galo, accidentado hoy en el GP de Japón.

El accidente se produjo en la vuelta 42 cuando el Marussia del piloto francés impactaba violentamente contra la grúa que estaba en esos momentos tratando de retirar el Sauber de Adrian Sutil, accidentado instantes antes en la citada curva. Se ha dicho que el impacto fue de tal calibre (en torno a las 50 G) que el monoplaza del alemán, que estaba en esos momentos sobre la grúa, se precipitó contra el suelo.
A partir de ahí todo fue bastante confuso ya que no se registraron apenas imágenes de lo ocurrido. De repente salió el Safety Car a pista, acompañado del coche médico y en ese momento se desató el caos. No había noticias de Sutil y sólo en el box de Marussia se sabía que Bianchi había sufrido algún accidente al perder la comunicación por radio con el galo.
De repente, las cámaras empezaron a enfocar al box de Marussia y al lugar de los hechos, dónde no había ni rastro del monoplaza del francés y, por contra, sí se podía ver a Adrian Sutil, aparentemente en buen estado.
Sin embargo, el coche médico seguía ahí y las carreras empezaron a sucederse en torno al centro médico. Empezando por la aterrada novia de Sutil hasta cada vez más miembros del staff de Marussia y cada vez más pilotos, a medida que iban conociéndose los detalles del accidente. En ese momento, se empezaron a filtrar detalles de lo ocurrido y el desasosiego comenzó a flotar en el ambiente.

El Marussia y no el Sauber era el principal afectado por la colisión y el estado del francés era francamente preocupante, especialmente cuando el helicóptero medicalizado se puso en marcha. El accidente había sido brutal y Bianchi se encontraba inconsciente dentro del cockpit, con evidentes signos de daños en la cabeza.
Tras su rápida evacuación al centro médico, fue su responsable el doctor Cecarelli quien dio las primeras noticias y no eran en absoluto alentadoras. Bianchi había sido trasladado por carretera al Hospital General de Mie, cercano al lugar de los hechos, ante la imposibilidad de que el helicóptero pudiese despegar por las malas condiciones atmosféricas.
Sin embargo, pronto se fueron filtrando detalles de lo ocurrido y enseguida se supo que Bianchi había sido trasladado por carretera en una UVI móvil a petición de los propios médicos, para evitar problemas con la diferencia de presión, debido a los problemas de presión intracraneal que sufría en esos momentos el joven piloto galo. Además, también trascendió que la evacuación se produjo con un tablero dorsal y un colchón de vacío, con el fin de garantizar al máximo la inmovilización del piloto.
Desde ese momento, todos los pilotos sin excepción, además de mostrar en Twitter su apoyo al compañero herido, se desplazaron al hospital donde se encuentran hasta ahora, aguardando nuevas -y esperamos que mejores- noticias acerca del estado de salud de Bianchi.
Desde aquí, mientras que el bueno de Jules Bianchi está siendo sometido a tan delicada intervención y se espera con inquietud el resultado de la cirugía, nos sumamos al hashtag #ForzaJules y deseamos que pronto volvamos a ver su sonrisa y su talento a bordo de un Fórmula 1.