Yamaha ha presentado su nueva YZR M-1, la moto con la que el equipo nipón pretende consolidarse como la única alternativa seria al dominio abrumador mostrado por Honda y Marc Márquez durante estas dos últimas temporadas.
En un acto llevado a cabo en las instalaciones de Movistar en Madrid, sus dos pilotos, Jorge Lorenzo y Valentino Rossi, han acaparado toda la atención, con unas jugosas declaraciones, mientras esperan al arranque de los primeros tests de pretemporada, el próximo día 4 de febrero en el trazado malayo de Sepang.
La nueva moto cuenta con un nuevo diseño, adaptado a las peticiones realizadas tanto por sus pilotos y en ella el equipo Yamaha ha depositado sus máximas expectativas de cara a la nueva temporada y superar las cuatro victorias, los 24 pódiums y el subcampeonato final de Rossi obtenidos en 2014.
Kouichi Tsuji, director técnico de Yamaha en MotoGP, resaltó los cambios llevados a caboen la nueva YZR M-1:«Hemos llevado a cabo muchos pequeños cambios en bastantes aspectos con el fin de lograr un buen desarrollo de la moto. Con ello esperamos ganar esas décimas de segundo necesarias para nuestros pilotos», dijo el ingeniero nipón.
En este sentido, el máximo responsable del euipo japonés, Lin Jarvis, también se mostró bastante ilusionado de cara a esta temporada, marcándose como principal objetivo «lograr la consistencia necesaria carrera tras carrera para ser lo más competitivos posible en una temporada que se presenta dura pero en la que tenemos depositadas muchísima confianza».
Su principal estrella y máximo aspirante al trono de Marc Márquez ha decidido hacer borrón y cuenta nueva de la decepcionante temporada pasada. Para ello ha aprendido de los errores y ha puesto los mimbres para volver a la senda del éxito.
«El año pasado no planifiqué bien mi preparación, así que ahora todo ha sido distinto. Me he entrenado más que nunca y estoy tan delgado y fibroso, tal y como cuando empecé en MotoGP, cuando tenía 20 años», dijo Lorenzo
«Pese a todo logré acabar muy bien el año 2014. Sumé muchos puntos en la segunda mitad de la temporada aunque al final sólo pudiera ser tercero porque Márquez y Rossi estuvieron muy fuertes. Mi objetivo es seguir con esa evolución, apostando por una regularidad que es importante pero también intentando ser más rápido para ganar más carreras», concluyó el campeón español.
Por su parte el italiano Valentino Rossi afronta la nueva temporada con la ilusión de un debutante. Su subcampeonato del año anterior supuso un empujón inesperado y, con la profesionalidad que siempre le ha caracterizado, quiere luchar de tú a tú con todos para lograr su décimo mundial
“Quiero continuar como el año pasado, cuando todo fue mucho mejor que en 2013. Ahora toca dar otro paso para poder luchar con Márquez, que ahora mismo es el número 1 aunque también creo que Jorge está muy cerca. La moto también ha mejorado y tenemos mucha curiosidad por probar cómo va, tanto en los primeros test de Sepang como en la primera carrera de Qatar. Tenemos que intentar ser fuertes desde la primera parte de la temporada, sumar el mayor número de puntos”, afirmó el campeonísimo italiano.
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