El Centro Tecnológico de Seat, ubicado en su planta barcelonesa de Martorell, cumple 40 años y lo hace gozando de una salud excelente y en uno de los mejores momentos de su larga historia.

Para celebrarlo, el fabricante español estará presente en la sexta edición de ClassicAuto Madrid, cuya 6ª edición se celebrará del 20 al 22 de febrero en el Pabellón de Cristal del Recinto Ferial de la Casa de Campo.
En la edición de este año, Seat ha reservado dos zonas muy diferenciadas. La primera contará con cuatro de los más importantes concept-car de la marca, como son el Seat Fórmula, el Salsa Emoción, el Tango y el Tribu.
El Seat Fórmula fue un prototipo presentado en el Salón de Ginebra de 1999. Un espectacular biplaza deportivo, que montaba un propulsor 2.0 turboalimentado de cuatro cilindros, 20 válvulas y 240 CV de potencia.
El Seat Salsa Emoción fue presentado en el Salón de París de 2000 y era un interesante monovolumen deportivo, repleto de soluciones tecnológicas, como su programa de suspensión de altura variable que se regulaba en función del terreno y un motor 2.8 V6 de 250 CV.

Por su parte, el Seat Tango se presentó en el Salón de Frankfurt de 2001 y era un deportivo cabrio de aire «retro», con un motor 1.8 Turbo de 180 CV y caja de cambios de seis velocidades.
Por último, el Seat Tribu fue presentado en el Salón de Frankfurt de 2007 y consistió en un SUV de diseño atrevido y marcado carácter todoterreno.
En la segunda zona, Seat traerá cuatro de sus vehículos más emblemáticos de siempre. El Seat 1200 Sport Bocanegra, que fue el primer coche desarrollado íntegramente en su Centro Tecnológico, el primer Seat 131 L 1430, con bastidor número 1, así como un espectacular Seat 124 D de 1975, el primer coche producido en la fábrica de Landaben (Pamplona) Asimismo, estará presente otro vehículo mítico de la marca como fue el Seat Málaga 1.5 GLX de 1985, también con el primer número de bastidor y que supuso el relanzamiento de la marca española.

Por último, Seat traerá a Madrid el Ibiza 1.5 que el Rey Juan Carlos I le regaló a su hijo, el Príncipe Felipe en 1986, con motivo de su 18º cumpleaños y que recientemente se ha incorporado al Museo Histórico de la marca española.
Se trata de una versión especial, en color bronce, que contaba con pasos de rueda traseros ensanchados, alerón y taloneras específicos, frenos de doble disco ventilados, motor de inyección, volante especial, asientos tipo Recaro y cinturón en las plazas traseras. Un lujo sin duda para aquella época, en un coche adecuado a la personalidad de su dueño.
sin duda la seat ha dado mucho a este pais y esperemos que lo siga dando
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