- Manor firma con Mercedes como nuevo suministrador de motores
- Manor ficha a Bob Bell y anuncia una importante reestructuración de su equipo técnico
Cuando todo apuntaba a que Manor estaba preparando un salto cualitativo importante de cara a 2016, especialmente tras hacerse público que su acuerdo con Mercedes como suministrador de motores, la situación en el equipo británico ha dado un giro inesperado y ciertamente preocupante que podría afectar seriamente a su continuidad en la Fórmula 1 a corto plazo.

Así pues, y a pesar de las altas expectativas que se estaban depositando en el equipo británico para la próxima temporada, Manor ha sufrido una sorprendente desbandada en su staff directivo y técnico, a raíz de las sucesivas renuncias de su actual Director General de la escudería, John Booth y de su lugarteniente y director deportivo, Graeme Lowdon.
Dos bajas a las que habría que sumar la de su flamante consultor técnico, Bob Bell cuando apenas llevaba cinco meses en el puesto, al que llegó en junio como fichaje estrella, procedente de Mercedes, con la misión de planificar el desarrollo del monoplaza del próximo año.
Aunque no hay una confirmación oficial por parte del equipo anunciando la salida de estas personas, lo cierto es que la prensa británica ya da por hecho que todos abandonarán Manor al acabar la presente temporada.
Los motivos para esta salida tampoco han trascendido, si bien, todo apunta a causas diferentes. Por un lado, el caso de Lowdon y Booth se debería a discrepancias con el máximo accionista del equipo, el millonario británico Stephen Fitzpatrick.
Al parecer, los dos responsables de Manor no habrían logrado ponerse de acuerdo con el magnate británico acerca de la futura financiación del equipo. En concreto, Booth y Lowdon consideran que es preciso un aumento en la inversión para dar ese salto de calidad necesario para competir el próximo año con el resto de escuderías,
Para ello sería preciso que el millonario británico vendiese parte de sus acciones o acudiese a una ampliación de capital, algo a lo que Fitzpatrick se habría negado.
De hecho, ya se habrían recibido algunas ofertas como las del promotor de carreras norteamericano Tavo Hellmund y del financiero británico James Carney, aunque nada se pudo concretar finalmente.
Por otro lado, el caso de Bob Bell es muy diferente ya que su renuncia, junto a la de otros ingenieros del equipo, estaría firmada desde hacía varias semanas. Sin embargo, los motivos de su dimisión no han sido desvelados.
Esta situación podría dejar sin efecto los acuerdos comerciales alcanzados con distintos patrocinadores para el año que viene y, lo que es más importante, pondría en serios aprietos la confirmación del acuerdo firmado con Mercedes, en lo que sería un más que posible rejón de muerte a la escudería.