Aunque ya tuvimos la oportunidad de ver al nuevo Toro Rosso STR11 y su nueva unidad de potencia Ferrari en la primera tanda de tests de pretemporada en Montmeló, lo cierto es que su presencia sorprendió a todos por lo austero de su decoración.

De riguroso oscuro y sin más distintivo exterior que los dorsales de sus pilotos en su carrocería, la escudería de Faenza saltó a pista en Barcelona sin haber hecho su presentación oficial.
Finalmente y minutos antes del arranque de la segunda tanda de tests invernales, en el mismo trazado catalán, Toro Rosso ha formalizado la «puesta de largo» del nuevo STR11, el primer monoplaza salido de su nueva factoría en Faenza.
En ese mismo acto, los italianos han aprovechado para presentar a sus nuevos patrocinadores, Casio y Falcon Private Bank, aunque sin la presencia de la petrolera española Cepsa, que ha abandonado este año la Fórmula 1.

«Estamos orgullosos de este coche y lo que representa en términos del trabajo, desde que comenzó su diseño hasta su fabricación en tiempo récord en nuestras nuevas instalaciones de Faenza», afirmó el Director del equipo, Franz Tost.
«Y me complace especialmente ver en 2016 el retorno a las unidades de potencia de Ferrari, con todo el mundo deseando trabajar una vez más con nuestros amigos de Maranello. Nada de esto sería posible sin la inestimable ayuda de nuestros socios y patrocinadores; Red Bull, Sapinda y Estrella Galicia», añadió.
«Estamos muy contentos de dar la bienvenida a nuestros amigos de Falcon Private Bank y para iniciar una nueva colaboración con Casio. En la Fórmula 1, las estrellas son los conductores y estoy ansioso por ver lo que nuestros dos jóvenes con mucho talento, Max y Carlos puede lograr este año, ya que ahora están en su segunda temporada», concluyó el responsable de la escudería.
Asimismo, Tost confirmó que será Max Verstappen quien se sitúe hoy al volante del STR11 y volverá a hacerlo el jueves. Por su parte, Carlos Sáinz se encargará de probar el nuevo monoplaza tanto el miércoles como el viernes.