Citroën busca asaltar de nuevo el trono del Mundial de Rallys (WRC) -en manos de Volkswagen desde 2013 de forma ininterrumpida- con el Concept C3 WRC, su arma definitiva de cara a la próxima temporada

Citroën Concept C3 WRC: Máxima adrenalina
Citroën Concept C3 WRC: Adrenalina sin límites

Tomando como base el nuevo Citroën C3 «de calle», el pequeño urbano francés se transforma en una bestia ultradeportiva y cuya musculatura define su carácter competitivo.

Externamente, se distingue no sólo por su pintura bitono y toques por distintas partes de la carrocería del mismo color que el techo, sino por su carrocería 55 milímetros más ancha que su «hermano pequeño», del que trae base.

El Citroën Concept C3 WRC se ha adaptado al mundo de la competición con la adopción de parachoques más oscuros, equipados con un lama y el famoso doble chevron, distintivo de la marca, resaltado en una barra cromada que se extiende hacia las luces diurnas LED.

Se ha trabajado también en la decoración: el conjunto del coche ha adoptado, especialmente el frontal, una seria de líneas amarillas. Los espejos retrovisores son ahora más oscuros, en carbono con toques amarillos y con una apariencia muy deportiva.

Una zaga digna de todo un campeón
Una zaga digna de todo un campeón

Como es lógico, este modelo no es el definitivo, a la espera de terminar de acomodarse a la reglamentación de la FIA para el WRC en 2017. Por ejemplo, aumento de la potencia, que deberá llegar hasta los 380 CV, para lo cual Citroën aumentará la brida del turbo hasta los 36 milímetros.

Además, este nuevo Citroën C3 WRC es más ancho por detrás, aumentando hasta los 1.875 miímetros, con una anchura total de 1,90 metros.Además, se incorpora un parachoques delantero más saliente y uno trasero con un difusor en fibra de carbono.

Por último, y a pesar de aumentar sus medidas, en Citroën han «puesto a régimen» a su nueva criatura, con el fin de reducir su peso en 25 kilogramos y se ha autorizado el control del diferencial central electrónico.

Hay que recordar que Citroën ostenta un récord hasta ahora imbatido en el WRC con sus 96 victorias parciales, sus ocho títulos mundiales de Constructores (entre 2003 y 2005 y de 2008 a 2012), así como sus nada menos que nueve campeonatos del mundo de Pilotos, logrados de forma ininterrumpida entre los años 2004 y 20012 por el gran Sébastien Loeb.

El pase de diapositivas requiere JavaScript.