La GP3 Series ha confirmado que seguirá los pasos de la Fórmula 1 y la GP2 e introducirá el ya famoso Drag Reduction System (DRS) a partir de la próxima temporada.

Situado en el alerón trasero, este dispositivo móvil, destinado a reducir la carga aerodinámica del monoplaza en recta y facilitar los adelantamientos, fue introducido en la Fórmula 1 en 2011 y se implementó en la GP2 el pasado año.
Al igual que en las dos categorías donde ya funciona, el uso del DRS dentro de la GP3 estará limitado a las zonas debidamente marcadas para su utilización en cada circuito tanto en carrera como en los entrenamientos (libres y de calificación).
Además, para su activación será necesaria una distancia no superior al segundo con respecto a los monoplazas que le antecedan.
El CEO de la GP2 y la GP3, el francés Bruno Michel,ha justificado la introducción de esta medida para la consecución de dos objetivos principales. Por un lado, preparar mejor a los pilotos para cuando lleguen a la GP2 y, por otro, mejorar la calidad de las carreras.
En una entrevista realizada a la revista Insider, la publicación oficial de la GP2, el máximo responsable de la categoría afirmó:
«Este año hemos introducido un nuevo monoplaza en la GP3 que nos ha dado una satisfacción del 100% en términos de fiabilidad, por lo que decidimos darles a los pilotos otra herramienta para su formación», dijo Michel a Insider, la publicación de la GP2.
«Por supuesto esto también le sumará picante a las carreras de GP3, las cuales han sido un poco tranquilas al comienzo de la temporada, pero en las últimas rondas han sido muy emocionantes.
«El DRS también atraerá pilotos a la serie porque ellos siempre están buscando algo que los prepare para el futuro».