Desde su llegada al mercado, allá por 1998, el Smart Fortwo ha convertido en un clásico de las grandes ciudades por sus reducidas dimensiones, su bajo consumo y unas prestaciones nada desdeñables.

Llaman a revisión los Smart Fortwo en EE.UU. por problemas de combustión espontánea
Llaman a revisión los Smart Fortwo en EE.UU. por problemas de combustión espontánea

El mercado norteamericano, al que llegó en 2006, se ha convertido en uno de sus principales nichos y en uno de los coches urbanos más vendidos.

Esto ha provocado que la National Highway Traffic Safety Administration (NHTSA), la agencia estadounidense encargada de velar por la seguridad en las carreteras, siempre puso su foco sobre el pequeño urbano alemán, especialmente desde que detectó en 2008 algunas anomalías en lo relativo a los crash-tests de su segunda generación.

En aquella ocasión, los tests de la agencia detectaron que, en caso de colisión lateral, la puerta del conductor tendía a abrirse, con el evidente riesgo de que sus ocupantes pudieran salir despedidos.

Desde entonces, Smart no había vuelto a tener problemas con la agencia estatal norteamericana hasta que recientemente ha descubierto un posible error de fabricación que podría tener funestas consecuencias.

Asì pues, en base a una serie de denuncias presentadas por al menos seis usuarios entre los años 2014 y 2016, se ha detectado un problema que podría llevar a la combustión espontánea del coche.

En concreto, se han registrado varios casos en los que el pequeño Smart ha empezado a arder en marcha y, lo que es peor, sin motivo alguno y sin que se aprecie dicho incendio en el habitáculo.

De hecho, sólo los avisos de otros conductores al ver las llamas, han evitado una tragedia ya que que en ningún caso, desde dentro del habitáculo era imposible apreciar el incendio, hasta que ha sido demasiado tarde y el coche ha acaba

Por este motivo, la NHTSA ha tomado cartas en el asunto y se ha visto obligada a llamar a revisión extraordinaria  a las más de 43.000 unidades de la segunda generación del Smart Fortwo fabricadas entre los años 2008 y 2009.

Como no podía ser de otra forma, la firma germana ha mostrado su máxima predisposición a colaborar con la agencia estadounidense. Además de confimar que no se ha registrado muerte o lesión alguna derivada de esta incidencia, Smart se hará cargo de citar personalmente a todos los usuarios afectados y revisar gratuitamente todos sus vehículos.