- McLaren ya tiene fecha para el lanzamiento de su coche
- Zak Brown, nuevo CEO de McLaren Technology Group
Cuando falta menos de un mes para que McLaren presente en sociedad su esperado MP4-32, Zak Brown ha arrojado un cubo de agua helada sobre los fans de la marca y, en particular, de Fernando Alonso.

El nuevo CEO de la firma de Woking ha valorado negativamente la ausencia de patrocinadores relevantes en el equipo para este año, algo que como era previsible, está afectando negativamente en sus presupuestos de inversión.
Una carencia de grandes patrocinadores que viene acuciando al equipo desde hace ya cuatro años, cuando su último gran sponsor, Vodafone, dejó la Fórmula 1.
Es más, desde entonces, McLaren no sólo no ha conseguido firmar a ningún patrocinador de relevancia sino que, además, se ha ido dejando por el camino a otros patrocinadores como Boss, TAG-Heuer o más recientemente, la firma de whisky Johnnie Walker
Esto está redundando en una bajada importante de ingresos que, por más que el anterior CEO de McLaren, el cesante Ron Dennis, es indudable que se ha venido traduciendo en una merma importante en el desarrollo de sus coches, y el de este año no iba a ser una excepción.
Por eso Brown ha depositado sus máximas expectativas en 2018. Un año en el que se espera que McLaren recupere a ese gran inversor que ayude de forma definitiva al despegue de una escudería que, tristemente, se está acostumbrando demasiado a la mediocridad.
“El acuerdo tiene que estar hecho en 2018, no podemos ir mucho más allá. Esta temporada ya está terminada porque llevamos un año trabajando con una gran corporación para conseguir el trato adecuado. Ya estamos trabajando duro. A simple vista, puede haber relativamente poco progreso durante 2017, pero el próximo año debe ser un punto de inflexión para nosotros», afirmó el actual CEO de McLaren en una entrevista a la publicación Autocar.
¿Significa que el McLaren MP4-32 será un nuevo fiasco como los anteriores? No lo parece. Primero porque tras un año de travesía en el desierto como lo fue 2015, Honda y McLaren han acabado por tomarle por fin el pulso a la categoría.
A esto hay que añadirle que la temporada pasada ya se pudieron atisbar avances importantes, que se han puesto de manifiesto aún más en el desarrollo del coche para 2017, según han confirmado distintas fuentes desde dentro y fuera de McLaren.
Aunque es evidente que el margen de mejora con respecto a aquella temporada era enorme, el trabajo llevado a cabo este invierno entre Inglaterra y Japón por los ingenieros y mecánicos de McLaren y Honda transmite buenas sensaciones.

Ahora bien, de las palabras de Brown se deduce que, aunque se mejore, no debemos esperar un espectacular progreso en lo que al desarrollo del coche de este año se refiere. Por eso, tal vez, el responsable de la firma británica no ha querido elevar demasiado el listón en sus expectativas.
«Vamos a mejorar. Sería peligroso ponerle un número, pero nuestra trayectoria en2016 fue bastante alentadora. Fuimos sextos, lo que supuso una gran mejora con respecto al desastroso noveno puesto de 2015. Y fuimos mejorando a medida que avanzaba la temporada. Estoy seguro de que con unas cuantas carreras más podríamos haber ameazado a Williams por el quinto lugar», añadió Brown.
Por tanto, da la sensación que el CEO de McLaren está empezando a abonar el terreno para aplacar las iras de los aficionados, en caso de que este año tampoco lleguen los resultados esperados y Fernando Alonso y su nuevo compañero Stoffel Vandoorne no puedan disponer de las herramientas más adecuadas para optar a cotas más altas que las de estas últimas temporadas.
«McLaren es una marca distinta a cualquier otra. Tiene un sentido de atemporalidad y un patrimonio más rico que nadie, si exceptuamos, tal vez, a los chicos de rojo. Tenemos grandes recursos y estamos ayudando a nuestros socios a desarrollar sus propios negocios con tecnología, marketing, branding… Esto no es solo cuestión de pegatinas en coches de carreras», concluyó.