El GP de China nos ha dejado el retorno a lo más alto del pódium de Lewis Hamilton, que recupera su cetro de máximo favorito al trono del campeonato de este año, tras una carrera tan inteligente como cambiante.

Le acompañaron en el cajón un brillante pero desafortunado Sebastian Vettel, que hizo lo que buenamente pudo para llevar a su Ferrari a la segunda plaza, y un exhuberante Max Verstappen.
El piloto neerlandés protagonizó la gran remontada del día, saliendo desde la 17ª plaza y, tras una brillante y muy valiente carrera, hasta acabar en la tercera posición final, tras una dura pugna con su compañero Daniel Ricciardo.
Por lo demás, fue una carrera en la que hubo muchas alternativas, especialmente por detrás, con intensas batallas intermedias en todos los asp
Españoles en carrera
El GP de China fue un nuevo cara y cruz para nuestros pilotos. A pesar de que ambos mostraron sus mejores caras al volante, Fernando Alonso y Carlos Sáinz vivieron sus carreras de forma francamente diferente.
El más atrevido fue Carlos Sáinz. El madrileño fue el único que, previendo que no habría más lluvia y que la pista se iría secando, decidió ahorrarse un pitstop y salió directamente con neumáticos lisos.
Esto supuso un hándicap enorme ya que, en su pésima salida, Sáinz arruinó su magnífica calificación del sábado, cayendo al final de la clasificación, con salida de pista incluida.

Manejar el coche en esas condiciones del asfalto era una tarea heroica y, aunque el madrileño lo intentó, su arriesgada apuesta le salió rana, al menos en las primeras vueltas.
Aun así, la entrada en pista de los Safety Cars, desplegados durante el primer tercio de carrera, le devolvieron su ventaja estratégica, quedando incrustado en una cómoda sexta plaza que le permitió batirse el cobre, entre otros con Fernando Alonso, su compañero Kvyat y los Force India.
Finalmente y, a medida que se fue quedando en tierra de nadie, acabó disfrutando de una plácida carrera y firmó un más que meritorio séptimo puesto.
Sobre Fernando Alonso y, sobre todo, sobre la lamentable fiabilidad de su McLaren Honda, poco hay que añadir que no se haya dicho ya estos dos años y pico. Debe ser frustrante para un tipo tan competitivo como él tener que sufrir día sí y día también los reveses de una mecánica tan escasamente brillante como nula en su fiabilidad.
En Shanghai volvió a dar una nueva lección de pilotaje y de cómo exprimir al máximo un coche tan poco competitivo como el McLaren MCL32.
Al igual que ocurrió en Australia, el asturiano llevó su coche al extremo y aunque lo intentó todo, resistiendo las acometidas de Bottas, Pérez y sobre todo de Carlos Sáinz, su coche volvió a romper, quedando fuera de carrera por segunda vez consecutiva en esta temporada.
En esta ocasión, lo que se rompió fue el palier pero, como dijo el propio Alonso nada más acabar la carrera, no es más que la consecuencia de no haber podido rodar apenas en los tests de pretemporada. Cada carrera descubren nuevos fallos, de modo que las probabilidades de ser fiables y competitivos se diluye en cada carrera.
Análisis de la carrera
La prueba, en la que la climatología fue la gran protagonista, estuvo presidida por una fina pero intensa lluvia que, minutos antes del arranque, dejó la pista bastante mojada. Esto obligó a que todos los pilotos, salvo un osadísimo Carlos Sáinz, optasen por montar de salida los compuestos de lluvia intermedia.
Sin embargo, la lluvia desapareció y, a medida que la pista se secó, obligó a los pilotos a optar por compuestos de seco y es ahí donde la estrategia jugó un papel predominante. Si a eso le unimos una serie de incidentes, especialmente al inicio, cuando con la pista ya seca pero muy fria.
Esto provocó que pilotos como los rookies Lance Stroll o, sobre todo, Antonio Giovinazzi, sufrieran sendos accidentes, que obligaron a desplegar por dos veces al Safety Car. El primero de ellos, virtual y el segundo, tras el enorme trompazo del Sauber del italiano, presencial y que marcaron el devenir de lo ocurrido después.
Hay que reconocer que Lewis Hamilton tuvo una pizca de suerte ya que se puede decir que se le apareció la Virgen en forma del segundo Coche de Seguridad.
Sebastian Vettel le había ganado por la mano, entrando a cambiar sus compuestos de lluvia por unos slicks y había cobrado una ventaja estrategica que, desgraciadamente, con el despliegue del segundo Safety Car le permitió al británico recuperarse y hacer lo propio con sus compuestos de seco.

Para más inri, la pequeña o nula ventaja que le quedaba al alemán para repetir triunfo se esfumó cuando, una vez relanzada la carrera por segunda vez, se encontró con un inesperado tapón formado por su propio compañero, Kimi Raikkönen, incapaz de rebasar al Red Bull de Max Verstappen.
El finlandés, que adoleció todo el fin de semana de ritmo competitivo, estuvo casi 10 interminables vueltas sin poder adelantar al joven piloto holandés.
Esta incómoda situación duró hasta que Vettel, harto de esperar y sabedor de que era más rápido que los pilotos que le antecedían, decidió cortar por lo sano.
El alemán se lió la manta a la cabeza y protagonizó un par de espectaculares adelantamientos a su compañero y a Versappen que, si bien, no le iban a permitir llegar hasta Hamilton, que había aprovechado para poner tierra de por medio, al menos le acercaban hasta el segundo lugar del cajón.
Sin embargo y, a pesar de los esfuerzos de Vettel por dar caza a Hamilton, fueron infructuosos. Cada intento del alemán apretaba a fondo para reducirle un par de décimas al británico, era respondido por éste con una nueva vuelta rápida.
Finalmente y transcurridas unas vueltas desde el último stint del Ferrari, Vettel tiró la toalla y se dedicó a nadar y guardar la ropa, dando por bueno el segundo puesto, ya que sólo un milagro en forma de desfallecimiento mecánico del Mercedes le podría dar la victoria.
Un segundo puesto que intentó poner en riesgo Max Verstappen. El holandés logró sobreponerse al error que le abrió la puerta del podium a Sebastian Vettel y, tras humillar a Valtteri Bottas, intentó sin éxito llegar hasta el alemán.

Un sobreesfuerzo que estuvo a punto de acusar cuando un inteligente Daniel Ricciardo le acabó dando caza a falta de cinco vueltas para el final. Sin embargo y a pesar del subviraje, el holandés mantuvo a raya perfectamente a su compañero, ganándose el derecho de acompañar a Hamilton y Vettel en el cajón.
Por detrás, hubo bastante guerra y prácticamente todos los puestos, desde el tercero hasta el último se peleaban al límite.
Muy bonitos fueron, por ejemplo, los duelos de Romain Grosjean con Jolyon Palmer y Nico Hulkenberg por la 12ª posición, casi tanto como el de los dos Red Bull por la tercera.
O los de Esteban Ocon con Felipe Massa y Sergio Pérez por los puntos. Casi tan emocionante como el que sostuvieron casi al final un redivivo Kevin Magnussen con el propio piloto mexicano por la octava posición.
Lo mejor del día
Por derecho propio, si hay un protagonista destacado del GP de China, ése es Max Verstappen. No sólo por su increíble salida, que le permitió recuperar 10 puestos en la primera recta sino por el espectáculo que brinda a diario.
Además de sus adelantamientos, algunos de ellos imposibles, como los que hizo a su compañero Daniel Ricciardo en la vuelta 11 o a Valtteri Bottas en la vuelta 33, el holandés demostró que es un hueso durísimo de roer. Que se lo pregunten a Kimi Raikkönen y a Sebastian Vettel, que tuvo que sudar sangre para poder rebasarle.

También hay que reseñar la gran carrera de Kevin Magnussen y Haas. El danés sumó los primeros puntos para la escudería norteamericana en una gran carrera en la que estuvo muy por encima de su compañero.
Magnussen supo gestionar perfectamente sus neumáticos, lo que le permitió no sólo superar sino después mantener a raya a los dos Force India y firmar sus primeros puntos desde 2014, cuando militaba en McLaren.
Lo peor del día
Una de las decepciones más grandes del día fue Valtteri Bottas. Un estúpido trompo mientras rodaba detrás del Safety Car acabó relegándole a la parte trasera del pelotón. Auque luchó por recuperarse, tan solo pudo llegar hasta la sexta plaza. Demasiado poco para un coche que daba mucho más de sí.
La otra, entre otras cosas por el buen rendimiento que apuntaba el Williams durante el fin de semana, fue Felipe Massa. Aunque a nadie le debería sorprender a estas alturas, lo cierto es que al carioca se le vieron todas las costuras, especialmente al inicio de la carrera.
En cuanto la pista se moja, es tremendamente significativo el bajón que ofrece Massa en su pilotaje y hoy no ha sido una excepción. Rodando sin ningún tipo de empuje, en ningún momento se mostró competitivo, dando la sensación que lo único que le importaba era que la carrera acabase cuanto antes.
De nada sirvió que el brasileño tuviese que defender el honor de Williams, habida cuenta además del accidente de su compañero Lance Stroll, embestido por detrás por Sergio Pérez en la salida. Massa estuvo gris y muy pasota y finalmente acabó en una más que discreta 13ª posición.
Otra gran decepción fue la de Renault. De Jolyon Palmer, para el que su presencia en la parrilla sigue siendo una incógnita, no se esperaba nada, sí que había mucha expectación por ver hasta dónde podría llevar el RS17, tras una magnífica calificación en la que se metió en la Q3.

Sin embargo, entre que su salida no fue muy brillante y que adelantó indebidamente mientras el Safety Car estaba en pista, lo que le hizo acreedor a una sanción de cinco segundos, acabó hundido y fuera de los puntos.
Clasificación de la carrera
Tras 56 vueltas al trazado del Circuito Internacional de Shanghai, así quedó la clasificación final
- Lewis Hamilton (Mercedes AMG), en 1h 37′ 36»
- Sebastian Vettel (Ferrari), a 6,2»
- Max Verstappen (Red Bull TAG-Heuer), a 45,1»
- Daniel Ricciardo (Red Bull TAG-Heuer), a 46,0»
- Kimi Raikkönen (Ferrari), a 48,0»
- Valtteri Bottas (Mercedes AMG), a 48,0»
- Carlos Sáinz (Toro Rosso Renault), a 1’12»
- Kevin Magnussen (Haas Ferrari), a 1 vuelta
- Sergio Pérez (Force India Mercedes), a 1 vuelta
- Esteban Ocon (Force India Mercedes), a 1 vuelta

Clasificación del Mundial de Pilotos
Tras dos pruebas disputadas y con los mismos protagonistas principales que en Australia, tanto Lewis Hamilton como Sebastian Vettel empatan a puntos en la clasificación general del campeoanto de pilotos.
Le siguen por detrás, aunque a más de 20 puntos, el siempre sorprendente Max Verstappen, Valtteri Bottas, que ha acusado el «pinchazo» de hoy, y Kimi Raikkönen, todos ellos en un pañuelo.
- Sebastian Vettel (Ferrari), 43 puntos
- Lewis Hamilton (Mercedes AMG), 43 puntos
- Max Verstappen (Red Bull TAG-Heuer), 25 puntos
- Valtteri Bottas (Mercedes AMG), 23 puntos
- Kimi Raikkönen (Mercedes AMG), 22 puntos.
Clasificación del Mundial de Constructores
Las cosas se siguen apretando entre los dos grandes favoritos del año, Mercedes y Ferrari. Aunque por un solo punto, los de las Flechas Plateadas dan el relevo en la cabeza de la clasificación, mientras ambos equipos abren brecha con respecto a sus rivales.
En tercer lugar figura Red Bull, que sigue a duras penas la estela de sus dos competidores aunque ya se distancia del resto de la «clase media», encabezada por Toro Rosso.

Además, merced a los puntos sumados hoy por Magnussen, ya sólo quedan tres escuderías por puntuar como son Renault, Sauber y McLaren. Los de Woking ocupan el «farolillo rojo» de la clasificación debido a sus cuatro abandonos en estas dos carreras.
- Mercedes AMG, 66 puntos
- Ferrari, 65 puntos
- Red Bull TAG-Heuer, 37 puntos
- Toro Rosso Renault, 12 puntos
- Force India Mercedes, 10 puntos
- Williams Mercedes, 8 puntos
- Haas Ferrari, 4 puntos
- Renault, 0 puntos
- Sauber Ferrari, 0 puntos
- McLaren Honda, 0 puntos