Renault ha probado con éxito un novedoso sistema de recarga dinámica de vehículos eléctricos, esto es, que permite la carga de este tipo de coches en movimiento.

La prueba se llevó a cabo en una pista de pruebas de 100 metros de largo construida en Satory (Versalles) por el instituto francés de investigación Vedecom, en el marco del Proyecto FABRIC.
El desarrollo del proyecto corrió a cargo de Qualcomm Technologies y Vedecom, que se ocuparon de la instalación del sistema de recarga en la pista mientras que Vedecom y Renault integraron el sistema en dos Renault Kangoo Z.E.
Tras el éxito de esta primera fase, Vedecom ha confirmado el arranque en próximas fechas de una segunda fase de pruebas.
Allí evaluarán el funcionamiento y la eficacia de la transferencia de energía a los vehículos dentro de un amplio abanico de escenarios prácticos. Por ejemplo, la identificación y la autorización de acceso, el acuerdo sobre el nivel de potencia entre la calzada y el vehículo, la velocidad y la alineación del vehículo con respecto a la pista.
«Contribuir a este apasionante proyecto nos ha permitido probar y seguir buscando la carga dinámica en nuestros Kangoo Z.E.», afirmó Eric Feunteun, Director del Programa Vehículos Eléctricos del Grupo Renault
«Nuestros ingenieros de investigación han trabajado en estrecha colaboración con los equipos de Qualcomm Technologies y Vedecom para conseguir una demostración lograda de integración del sistema de carga dinámica de vehículos eléctricos en el marco de FABRIC. Consideramos la carga dinámica como una vía para mejorar aún más la utilización de los vehículos eléctricos y su accesibilidad», concluyó el directivo francés.
Por su parte, Steve Pazol, Vicepresidente y Director General de la división de Carga Inalámbrica de Qualcomm Incorporated afirmó: «Somos inventores. Cargamos vehículos eléctricos sin cable. Esta demostración de carga dinámica encarna esta idea»
Por último, decir que el Proyecto FABRIC es un ambicioso plan de investigación, dotado con nueve millones de euros procedentes de la Unión Europea para el estudio de la viabilidad tecnológica y económica así como la sostenibilidad socio-ambiental de la carga dinámica de los vehículos eléctricos inalámbricos.
Este proyecto se inició en enero de 2014 y continuará hasta diciembre de 2017 bajo el paraguas de un consorcio integrado por 25 socios, procedentes de nueve países europeos, entre los que figuran constructores de automóviles, fabricantes de equipos, proveedores de servicios y organismos de investigación sobre infraestructuras automovilísticas, viales y energéticas.