El equipo Toro Rosso ha vuelto a sorprender a todos anunciando que su más reciente incorporación, el francés Pierre Gasly, no estará en el GP de EE.UU. y su puesto será ocupado por el neozelandés Brendon Hartley.

El motivo de esta ausencia está en el hecho de que Gasly se está jugando en estos momentos el título de campeón de la Super Fórmula japonesa.
Se da la casualidad que este próximo domingo se disputará la última carrera del citado campeonato, por lo que los responsables de Red Bull han decidido brindarle al joven piloto galo la posibilidad de ganarlo, antes de continuar con su carrera en la Fórmula 1 en el seno de la firma austríaca.
El reemplazo de Gasly en Austin será el neozelandés Brendon Hartley. Una auténtica sorpresa ya que los de Faenza han preferido buscar en el mercado a un veterano ex-piloto de la casa como Hartley que darle la alternativa a Sean Gelael, actual piloto probador de Toro Rosso.
Hartley, que cumplirá en noviembre 28 años, es piloto de Porsche y lidera actualmente el Mundial de Resistencia, del que ya se proclamó campeón en 2015, además de ganar la edición de este año de las 24 Horas de Le Mans.
El hijo pródigo de Red Bull vuelve a casa
Criado a los pechos del Red Bull Junior Programme, debutó en febrero de 2008, con apenas 18 años, en un show en Rijad, a bordo de un Toro Rosso STR3. En noviembre de ese mismo año fue seleccionado como piloto reserva tanto para Red Bull como para su equipo «satélite».
Llamado a debutar en la temporada 2009 en las primeras carreras debido a una lesión de Mark Webber, se encontró con el problema de no disponer de la Superlicencia hasta abril de ese año, por lo que no pudo cumplir su sueño y tuvo que ver cómo un piloto retirado como David Coulthard ocupaba su lugar en Albert Park y Sepang.
Debutó como piloto probador en el GP de España de 2009 pero perdió su puesto en Toro Rosso ante el empuje del español Jaime Alguersuari en mitad de la temporada, al tiempo que David Coulthard se quedaba en Red Bull como tercer piloto. De esta forma, Hartley acabó corriendo en la Fórmula 3 y en las World Series by Renault hasta acabar la temporada.
En 2010, Hartley fue nombrado de nuevo piloto reserva para Red Bull y Toro Rosso junto a un joven Daniel Ricciardo hasta la sexta carrera de la temporada. Sin embargo, desavenencias con la dirección de Red Bull provocaron su salida del equipo.

En 2012 ficha por Mercedes como piloto de pruebas y fue precisamente con las Flechas Plateadas con quien vivió su última experiencia a bordo de un monoplaza de Fórmula 1.
Fue en septiembre de ese mismo año, cuando se subió a un Mercedes en una de las tres jornadas de Tests de Jóvenes Pilotos disputadas en el circuito francés de Magny-Cours. Allí marcó el tercer mejor tiempo, por detrás del Ferrari del desaparecido Jules Bianchi y el Force India del venezolano Rodolfo González,
Aunque renovó con Mercedes como probador en 2013, lo cierto es que su carrera como piloto en la Fórmula 1 finalizó sin pena ni gloria.
En 2014 decidió probar suerte como piloto oficial de Porsche en el WEC, donde su carrera cobró un protagonismo inesperado. Tras un año de transición, llegó un triunfal 2015.
Ese año se proclamó campeón de la categoría haciendo equipo con Mark Webber y Timo Bernhard y firmó su primer pódium en Le Mans, detrás del otro Porsche de Nico Hulkenberg, Earl Bamber y Nick Tandy.
Tras un año 2016 en el que no pudo brillar, la presente temporada ha supuesto la consagración definitiva de Hartley. Además de lograr su primera victoria en las 24 Horas de Le Mans junto a Timo Bernhard y su compatriota Earl Bamber, lidera con suficiencia el WEC, a falta de dos carreras para acabar el campeonato.
«Es una sensación increíble. Esta oportunidad es para mí toda una sorpresa, pero nunca dejé de lado mi ambición y mi sueño de niñez de llegar a la Fórmula 1», afirmó Hartley.
«He aprendido mucho desde los días en que fui piloto reserva de Red Bull y Toro Rosso, y los difíciles años que pasé me hicieron más fuerte y decidido. El Circuito de las Américas es un circuito que realmente disfruto y en el que he corrido recientemente. Trato de no poner demasiadas expectativas en mi debut en Fórmula 1, pero me siento preparado para ello», añadió el piloto neozelandés.