Fernando Alonso debutó con éxito en su primera toma de contacto con Toyota, a bordo de un TS050 Hybrid de la categoría LMP1, en los tests que se disputaron el día de ayer en el circuito de Bahrein.

El piloto español rodó sin problemas durante nada menos que 113 vueltas en las más de cinco horas que estuvo al volante del Toyota, divididas en dos tandas. Una de dos horas por la mañana y otra de tres, disputada por la tarde.
Durante el tiempo que estuvo en pista, Alonso firmó un magnífico crono de 1’43»013 durante la sesión vespertina, apenas siete décimas más lento que el mejor de los tiempos del día, marcado por el británico Mike Conway a bordo del otro Toyota, quien paró el reloj en 1’42»381, también en la sesión de tarde.
De esta forma, y aunque no hay confirmación oficial, se da por hecho que estará en la parrilla de la próxima edición de las 24 Horas de Le Mans en una nueva apuesta del piloto asturiano por la Triple Corona, tras su intento fallido de este año de ganar las 500 Millas de Indianápolis.
El trabajo del asturiano impresionó al Director Técnico del equipo Toyota, el francés Pascal Vasselon, quien se mostró gratamente sorprendido por su profesionalidad, afirmando del asturiano que se mostró «altamente disciplinado» y «entusiasta» en sus primeros kilómetros con un coche del WEC.

Por su parte, Fernando Alonso describió su debut con Toyota como «un gran día».
«Creo que una prueba en un LMP1 siempre es algo agradable para cualquier piloto de carreras, estos coches son increíbles de conducir y son muy consistentes en las temporadas», afirmó el asturiano.
Sin embargo, Alonso no quiso despejar la incógnita sobre su futuro a corto o medio plazo en el Mundial de Resistencia y, ni mucho menos, si ese futuro pasará por Toyota.
«Algún día estaría bien correr en Resistencia», dijo. «No sé cuándo, pero la Resistencia es uno de mis objetivos en el futuro cuando acabe mi carrera en la Fórmula 1″, añadió.
Alonso se enfrenta a una de las semanas más ajetreadas de todo el año ya que, tras esta primera toma de contacto con la máxima categoría de la Resistencia, viajará este martes a la localidad turolense de Alcañiz. Allí, el asturiano se pondrá por vez primera a los mandos del Ligier JS P217 de la categoría LMP2 con el que disputará en enero las 24 Horas de Daytona.
Por último, y para acabar esta intensa semana, Fernando Alonso tomará un nuevo avión que le llevará Abu Dhabi, donde le espera la última prueba del Mundial de Fórmula 1, en el Circuito de Yas Marina.