El pasado fin de semana, el siempre emocionante y peligroso GP de Macao de Fórmula 3 estuvo a punto de acabar en una inmensa tragedia debido al espeluznante accidente sufrido por la piloto alemana Sophia Floersch.
La jovencísima piloto germana, de apenas 17 años, fue víctima de un terrible choque cuando, durante la disputa de la carrera, se tocó con el monoplaza del japonés Sho Tsuboi.
En ese momento, Floersch perdió el control de su coche, que salió literalmente volando a gran velocidad durante al menos 20 ó 30 metros para acabar estrellándose de forma violenta contra una grada supletoria en la que había varios fotógrafos y comisarios de carrera.
El resultado del accidente, del que se temió lo peor, se saldó con la piloto alemana evacuada a un hospital local, donde se le diagnosticó una fractura en su columna vertebral, dos fotógrafos heridos de distinta consideración (uno de ellos grave, con una lesión en el hígado) y un comisario también afectado por el impacto.
Afortunadamente para Floersch, no sólo puede contarlo sino que además, y a pesar de la enorme gravedad de sus heridas, ha informado por medio de su padre que puede mover los brazos y las piernas, por lo que no parece haber lesión medular alguna. Eso sí, tendrá que ser sometida esta semana a una importante cirugía para reducir las fracturas en sus vértebras.
Desde luego, viendo las imágenes parece un auténtico milagro de que aquello no acabase en una tremenda carnicería. Desde aquí le deseamos una pronta recuperación a todos los afectados.
El Cuentakilómetros 