Aunque todavía queda algo más de una semana para el inicio de esta accidentada temporada 2020, Williams ha sorprendido a todos con la presentación de sus nuevos colores.
Una nueva imagen que estrenará en Austria y que supone una clara ruptura con lo que habíamos visto el pasado año y en los entrenamientos de pretemporada en Barcelona, justo antes de la pandemia, en los que el equipo británico lucía una llamativa combinación de rojo, blanco y azul.
El detonante de este cambio tan radical está en la ruptura unilateral por parte del fabricante de Grove con la firma de móviles norteamericana RokIT, su principal sponsor desde 2019 y que iba a patrocinar a Williams hasta 2023. Un acuerdo que se truncó abruptamente de forma unilateral por parte de los británicos a mediados del pasado mes de marzo, justo al inicio de la crisis por el Coronavirus.
El caso es que, sin sponsor, se imponía un cambio radical en la imagen del equipo que, a falta de nuevos patrocinadores, ha optado por una vuelta a los colores de los últimos años, con una gran presencia del blanco con ribetes azules, para dar protagonismo a los dos únicos sponsors de cierta importancia que aún le quedan a los de Sir Frank.
De esta forma, lucen ahora la marca canadiense de alimentación Sofina, con una presencia más destacada, así como la compañía tecnológica estadounidense Acronis y la firma italiana de café Lavazza, de forma más discreta.
Ni uno más, ni uno menos, aunque fuentes cercanas al equipo británico han afirmado que se irán incorporando nuevos patrocinadores en las próximas semanas.
Quizás por eso han dejado libre la parte delantera del alerón trasero, en el que de momento sólo figura el nombre del equipo, aunque para ello van a necesitar bastante más que buena voluntad y, sobre todo, mejorar los paupérrimos resultados cosechados el pasado año y el anterior, en las que acabó último en el Campeonato de Constructores.
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